Ingesta calórica:
La mayoría de los estudios indican que las personas que siguen una dieta vegetariana suelen tener un peso corporal inferior al de las personas que siguen una dieta tradicional y omnívora. Es tal la diferencia, que en personas que siguen una dieta vegetariana estricta, crudívora o frugívora tienen más complicaciones para poder llegar al aporte calórico diario necesario, y en especial en las embarazadas, niños o ancianos. Con esta ingesta alta de hidratos de carbono y baja en grasas contribuyen también a este bajo peso corporal.
También deberá tenerse en cuenta que ya que ingieren una gran cantidad de fibra, las personas vegetarianas tendrán una menor sensación de hambre y mayor de saciedad, con lo que también va a contribuir a rebajar esa ingesta calórica diaria necesaria, aparte del estilo de vida activo que tienen, con lo que suelen incluir el aumento de la actividad física y se producirá una mayor quema de calorías.
No se ha asociado un aumento de peso en vegetarianos por el consumo de frutos secos (a pesar de su elevado aporte calórico), a pesar de que son alimentos que consumen en gran cantidad.
Esto es posible que se deba tanto a una pérdida de la grasa en forma de heces, como también por la composición global de su dieta y su estilo de vida activo.
El que los vegetarianos tengan un peso corporal menor que los omnívoros, lleva a muchas mujeres a querer adoptar este estilo de vida con el fin de perder peso, y rechazarán los alimentos que son energéticamente densos, basándose en que el vegetariano está aceptado socialmente en la mayoría de sociedades. En otros casos, pueden ser trastornos de la conducta alimentaria que intentan camuflar como dieta vegetariana, aunque los hábitos de este tipo de dieta no van a tener nada que ver con el desarrollo de una anorexia nerviosa.
Cantidad y calidad de aporte proteico:
No es complicado llegar a un aporte proteico correcto en cantidad y calidad. Es en las versiones más estrictas donde puede que haya algunos tipos de falta, sobre todo en embarazadas, niños y ancianos.
A pesar de consumir una cantidad inferior en proteínas, las cantidades son suficientes y cubren sobradamente las necesidades. Además, las proteínas de origen vegetal disminuyen la excreción del calcio a través del riñón, pero esta propiedad es más complicada de separar del efecto que tiene la ingesta de grasas saturadas y colesterol con la carne, y del mayor aporte de antioxidantes de las dietas vegetarianas.
En general, la digestibilidad de la mayoría de las proteínas de origen vegetal es menor que las de origen animal, pero en el caso de la soja no es así, y tendrá una digestibilidad similar a la del huevo. El tipo de cocción de los alimentos mejora la digestibilidad de las proteínas de origen vegetal, pero en algunos vegetales puede ser causa de pérdida de aminoácidos esenciales.
